La práctica del esquí, además de ser una magnífica diversión, conlleva la realización de un deporte de cierta exigencia física, y por lo tanto, tiene un riesgo potencial. Existe una elevada posibilidad de sufrir numerosos accidentes, por ello es muy aconsejable contratar un seguro de viaje de ski que cubra este tipo de contingencias.

 

No hay que olvidarse de que éste deporte se practica en lugares de difícil acceso, alejados de hospitales, incluso en ocasiones con condiciones climatológicas adversas, que dificultan la circulación de los servicios de emergencia.

Un apacible día de esquí puede convertirse en toda una pesadilla si es que no contamos con un seguro de esquí y las consecuencias de nuestros actos, aunque sean involuntarios, pueden resultar dramáticas.

Estas coberturas destacan por su flexibilidad; se pueden contratar por días, meses, o para toda la temporada, en función de la regularidad con que se practique.

El paquete básico, más económico, incluye asistencia personal ( accidentes, fallecimiento y repatriación sanitaria en caso de enfermedad), seguro de equipaje para robo, pérdida o deterioro, y cancelación o demora. Además, podemos contratar más coberturas para blindar nuestra estancia, y que todo resulte perfecto.

Por ejemplo, rescates en helicóptero, reembolso de las clases de esquí que hayamos contratado con antelación, forfaits no utilizados, e incluso traslados a hospitales especializados en el tratamiento de ciertas lesiones.  

Cabe destacar que este seguro no incluye responsabilidad civil, por lo que si tenemos un choque con un tercero, éste podría demandarnos y hacernos correr con todos los gastos que se deriven del accidente.

En Aseguratuviaje.com os prepararán una póliza a medida con la que disfrutar de vuestro deporte favorito. Bon voyage!