
Si seguis estos consejos, no tendrás porque padecer los viajes de larga duración.
Cuando sabes que te espera una travesía aérea larga y tediosa lo único que te puede aliviar el trance es saber que hay maneras de hacerlo mas llevadero. Comparto contigo algunos trucos que me han ayudado mucho.
Elige un asiento que te permita estirar tus piernas lo más posible, en la primera fila o próximo a la salida de emergencia son los mejores. Cuando confirmes la reserva online encontrarás la posibilidad de marcar tu butaca sobre un croquis del interior de la nave, es recomendable hacerlo con la antelación que indica la empresa para conseguir la mejor.
Si quieres evitar la cercanía con algún niño inquieto te aconsejo reservar lugar lejos de las mamparas que separan al pasaje de los servicios de vuelo pues generalmente los papás optan por estar cerca de las azafatas para ser asistidos rápidamente. Y si eres de los que duermen sin parar entonces evita butacas cercanas a los muy transitados baños.
Vestite cómodo
Descarta prendas que te gusten pero que no son confortables. Debe ser ropa ligera y holgada para moverte libremente. El calzado es fundamental porque tus pies seguramente se hincharán mucho y cuando quieras pararte sobre ellos no te sostendrán. Si llevas zapatillas acordonadas recuerda aflojar los cordeles para favorecer la circulación. Tus manos también se dilatarán y es muy peligroso llevar anillos ajustados, sácatelos al promediar el vuelo antes de que sea muy difícil hacerlo.
Contar con abrigo en un largo vuelo es muy necesario, la cabina va refrigerándose con el paso de las horas y aunque reclames para que regulen el frio no tendrás respuesta. Por eso una casaca liviana estará bien para complementar la manta que encontrarás en tu sitio
Maleta de cabina
Aunque pienses que es pequeña para colocarla sin problema en el buche maletero no debes cargarla mucho para poder maniobrar con ella cómodamente sin grandes esfuerzos. Una buena idea es llevar contigo un pequeño bolso de mano para las cosas que quieres tener cerca sin tener que bajar la maleta del buche a cada momento.
La quietud es una enemmiga silenciosa
La inmovilidad prolongada durante el viaje produce endurecimiento de las articulaciones y cuando repentinamente te mueves el riesgo de alguna lesión es frecuente. Para evitarlo levántate y camina por los pasillos varias veces y mueve los brazos en círculo para descomprimir hombros y cuello.
El jet lag
Cuando viajes lejos de tu país atraviesas husos horarios, y eso te provoca una descompensación en tus tiempos de descanso y actividad afectando el ciclo natural del día y la noche. Un truco válido es aguantar el sueño lo mas que puedas hasta después del servicio de comida, mira una película, lee, o escucha música y retrasaras el momento de dormir para lograr un sueño reparador y profundo sin recurrir a fármacos inusuales que pueden hacerte el efecto contrario desvelándote por completo.
Viajar confiado
El placer de viajar ha comenzado el día que programaste tu viaje y transitarlo debe ser también placentero. Manos expertas te llevan y te atienden en todo momento, así entonces, nada, a disfrutar y a concentrarte en imaginar todo lo nuevo que te espera y lo bien que lo pasarás. Si tomas en cuenta estos pequeños tips que he compartido contigo todo será más fácil para ti durante el vuelo por largo que este sea. Relájate y viaja.